sábado, 12 de noviembre de 2016

Felicidad y madurez



Bienvenidos a mi blog, mi nombre es Stella y soy una mujer de 45 años con muchas inquietudes y que poco a poco va descubriendo cual es el secreto de la felicidad en esta vida.

Mi intención es la de compartir con vosotras esos ciertos aspectos que me han hecho mejorar como persona y de las ataduras morales de las que me he tenido que librar para ello, vivimos en una sociedad intercomunicada y prácticamente no tenemos intimidad, por eso en ocasiones nos vemos forzados a ser otra persona distinta a la que seríamos con tal de "encajar".

Yo estoy casada y nunca me he resignado a ser una de esas amas de casa que viven para su marido y sus hijos y se pierden lo mejor de la vida, que conste que lo respeto profundamente, pero siempre he pensado que tenía muchas cosas que aprender y desde luego pasando todo el día de compras o en la cocina no ampliaría jamás mis horizontes.

Muchas madres cuando llegan a los 50 años o antes se dan cuenta de que tienen un cierto vacío, la vida pasa muy rápido y cuando menos te lo esperas eres una de esas viejas alcahuetas que no tiene nada de lo que hablar más que de los cotilleos de las vecinas o de los programas basura de la televisión, por lo tanto, hay que ser un poco más consciente básicamente si no quieres lamentarte en el futuro de que no has hecho nada que te llene.

Bien, pues hace años que empecé a ver asiduamente videos xxx y descubrí en el sexo todo aquello que necesitaba para sentirme bien. Digamos que lo tenía bastante descuidado y mi marido era un hombre bastante tranquilo y no muy sexual, por lo que con tanto abanico de videos porno gratis me resultó muy sencillo descubrir hasta dónde podía llegar y qué era lo que más me gustaba en este aspecto.

Me di cuenta de que había algo muy común en las escenas, en primer lugar en prácticamente todas la mayoría las chicas practicaban sexo anal y lo hacían con tanta naturalidad que decidí ponerlo en práctica, descubrí que los orgasmos eran aún mayores que los vaginales y obviamente en cuanto se lo propuse a mi marido me dijo que si. Ahora no hay semana que no lo hagamos por detrás y cada día lo disfruto más.

También supe cuanto le gustan a los jovencitos los videos de porno maduras y pese a que podría molestarle, le dije a mi marido que quería buscar a un chico de 20 años y que nos acompañara en nuestras relaciones sexuales. De nuevo aceptó y pese a ser pasivo, cuando hacemos tríos parece que es una persona diferente.

El caso es que aunque sea un poco extraño he basado mi felicidad en base a las folladas que echo y os puedo asegurar que no se me quita la sonrisa en todo el día solo de pensar en cual será el siguiente. En esta vida todo es válido siempre que haga feliz y no le hagas daño a nadie, os aconsejo que exploréis vuestra sexualidad cuanto podáis porque vida solo hay una.